Las discrepancias empiezan cuando se trata de confirmar si permiten al menos no contagiar a los demás, como ocurre con las quirúrgicas
Mantener la distancia de seguridad de 1,5 a 2 metros es exactamente igual de eficaz (Paolo Aguilar/EFE)
15 de abril de 2020 2:38 PM | Sara Rodríguez (EFE)
15 minutos. La escasez de mascarillas homologadas alentó la proliferación de iniciativas para fabricarlas de formas caseras con distintos materiales, pero ninguna de ellas impide ser infectado y hay división de opiniones entre expertos e instituciones sanitarias sobre si ayudan a no contagiar a los demás.
Tela, papel de cocina, filtros de café, botellas de plástico... Varía bastante la lista de materiales entre los que se puede elegir si se buscan tutoriales en internet para confeccionar mascarillas artesanales. Sin embargo, las opiniones sobre su verdadera eficacia frente al coronavirus son también muy distintas según los especialistas o los organismos sanitarios que se consulten.
La infectóloga, Belén Padilla, es tajante cuando se le pregunta por estas mascarillas. "No protegen a nadie, ya que, si estás enfermo, filtran el virus. Si pretendes protegerte de una infección, tampoco hacen de barrera”.
Según insiste, mantener la distancia de seguridad de 1,5 a 2 metros es exactamente igual de eficaz.
Alerta también que dan sensación de falsa protección y “con su uso se pueden olvidar otras medidas básicas, como mantener la distancia de seguridad y, ante todo, realizar un correcto lavado de manos”.
Padilla coincide con el criterio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que advierte además de que las mascarillas confeccionadas con algodón pueden ser incluso una fuente potencial de infección. Estas, al no ser resistentes a los fluidos, pueden retener humedad y contaminarse.
Solo hay consenso científico mundial en un punto: no sirven en absoluto para no contagiarse de coronavirus. Ni siquiera las mascarillas quirúrgicas cumplen este fin, salvo las de alta eficacia FPP, según explica la vicepresidenta del Colegio Oficial de Médicos de Madrid.
Las discrepancias empiezan cuando se trata de confirmar si permiten al menos no contagiar a los demás, como ocurre con las quirúrgicas. Frente al escepticismo de expertos, en varios países se optó por recomendar a la población el uso de estas mascarillas caseras, combinado con otras medidas.
El principal argumento de los partidarios de su uso es que, aunque no sean 100 % eficaces frente al coronavirus, sí puede ponerle alguna traba.
Así lo defiende la investigadora del Centro español de Investigaciones Científicas (CSIC), Beatriz Novoa, especialista en Inmunología y autora de un tutorial en YouTube para aprender a fabricar mascarillas con papel de cocina.
Además, el uso de mascarillas caseras permite reservar el suministro de las homologadas a quienes lo necesitan, como personal sanitario y enfermos de coronavirus.
Más optimista, Vladimir ZdimaL, jefe del departamento de Química y Física de aerosoles en la Academia de Ciencias de la República Checa, considera que, según su experiencia profesional, “una simple mascarilla casera puede prevenir la dispersión de hasta el 95-100 % de las microgotas potencialmente infectadas”.
También aconsejan su uso en Estados Unidos (EEUU). Allí, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) sostienen que las mascarillas caseras de tela pueden desacelerar la propagación del virus y evitar que quienes puedan sean portadores sin saberlo lo transmitan a otras personas.
En líneas generales, no hay informes científicos que confirmen cuál es su nivel de efectividad. Igualmente, si se opta por su uso no se debe dejar de realizar medidas preventivas, como lavarse manos o el distanciamiento social.
Los CDC recomiendan fabricar mascarillas de tela de “algodón de trama cerrada” que cuenten con varias capas o pliegues, cubran nariz y boca, puedan ajustarse de manera firme pero cómoda contra los lados de la cara y se aseguren a las orejas con algún tipo de lazo. Deben permitir respirar sin restricción y deben poder lavarse y secarse sin deformarse.
La OMS explica en su web oficial y en un video en inglés cómo debe colocarse, usarse, retirarse y desecharse correctamente una mascarilla, tanto si es de fabricación casera como si es homologada. Según la organización, hacerlo de manera incorrecta puede resultar no solo ineficaz sino peligroso.
En todo caso, la OMS insiste siempre en que usar mascarillas da una sensación de falsa seguridad y no debe sustituir las otras medidas preventivas.
Según detalla, para no contaminarla es preciso lavarse las manos con agua y jabón o desinfectante antes de colocarse la mascarilla y después de retirarla. Además, no se debe tocar mientras se lleva puesta y quitársela con cuidado de no tocar con los dedos la parte delantera.
Las mascarillas deben retirarse en cuanto empiecen a estar húmedas. Según el material, deben desecharse inmediatamente (si son de papel) o lavarse en una lavadora (si son de tela).