El director general dijo que recibe amenazas de muerte y ataques racistas desde hace tres meses
"Hay que trabajar por encima de divisiones políticas, religiosas o de cualquier otro tipo si los gobiernos quieren evitar ver más bolsas de cadáveres", dijo Tedros (Flickr)
8 de abril de 2020 5:50 PM | Con información de EFE
15 minutos. El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió "poner en cuarentena" cualquier intento de politización de la pandemia del coronavirus.
Señaló que este desafío sanitario solo podrá superarse si los países muestran unidad interna y solidaridad internacional.
Así contestó Tedros en una rueda de prensa virtual cuando se le pidió que comentase las acusaciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que ha afirmado que la OMS está supuestamente "sesgada" en favor de China. Por este motivo, amenazó con recortar los fondos que le destina su Administración.
Coincidentemente mañana se cumplirán cien días desde que, el 1 de enero pasado, la OMS recibiese la primera notificación de China sobre la aparición de una enfermedad desconocida que provocaba neumonía. Así como desde que activase de inmediato un grupo especializado para coordinar la respuesta desde su sede en Ginebra, a nivel regional y nacional.
Cinco días después todos los países miembros de la OMS fueron informados del brote y se publicó la información que se tenía hasta ese momento en el sitio web de la organización, lo que sería el inicio de una epidemia que se convertiría semanas después en pandemia.
"La OMS está haciendo todo lo que está en sus manos desde el inicio y lo seguiremos haciendo, día y noche, no queremos perder tiempo (·) por ahora hay que centrarse en combatir este virus", comentó.
Tedros sostuvo que para vencer el virus se necesita "unidad" en los países, por encima de diferencias políticas.
"Yo he sido político, sé lo difícil que puede ser, pero hay que hacerlo porque todos los partidos políticos deben tener la prioridad de salvar la vida de su gente, así que por favor que no se politice este virus", recalcó el jefe de la OMS, microbiólogo que fue ministro de Sanidad y Exteriores de Etiopía.
En resumen, agregó, "hay que poner en cuarentena la politización del COVID-19·". También trabajar por encima de divisiones políticas, religiosas o de cualquier otro tipo si los gobiernos quieren evitar ver "más bolsas de cadáveres".
Sin referirse en ningún momento al presidente estadounidense, Tedros dijo que los líderes tienen "muchas otras maneras de probar su valor". Dijo que utilizar el coronavirus para ello es como "jugar con fuego" e invitó a no usar la politización de la pandemia.
Tedros comentó, a raíz de eso, que ha recibido amenazas de muertes y ataques de distintos tipos, entre ellos de carácter racista.
"Hace tres meses recibo ataques personales, algunos racistas y para ser honesto estoy orgulloso de mi color. He recibido incluso amenazas de muerte, pero no me importa en lo absoluto ¿Por qué me importaría ser atacado si la gente está muriendo, si estamos perdiendo vidas cada minuto?", dijo el responsable de origen etíope.
El director general sostuvo que mientras los ataques sean contra él no les presta atención. Pero que siente una gran tristeza cuando están dirigidos contra la comunidad o el continente africano.
"Cuando es personal me da igual, yo no soy mejor que nadie, pero cuando se insulta a una comunidad entera, entonces basta, eso no lo puedo tolerar", comentó en un tono tranquilo.
Agregó que en la OMS "no se hace política" y que su misión es "preocuparnos por los pobres y los vulnerables" en estos tiempos en los que el mundo entero está envuelto en la crisis causada por el coronavirus.
"La OMS hará todo lo posible para no lamentar nada, pero en el camino nos equivocaremos, como cualquier ser humano", señaló. Recordó que hay y habrá evaluaciones sobre las medidas acertadas y los errores que la organización pudo haber cometido desde que se detectó la aparición del coronavirus.
El portavoz del Gobierno, Olivier Véran, rechazó de forma tajante la propuesta sindical de buscar una mediación que ayude a superar la crisis social y política que vive Francia desde hace semanas a cambio de aparcar la aplicación de la reforma