15 minutos. El periódico estadounidense The New York Times denunció que las dos últimas administraciones de EEUU intentaron apropiarse de los correos electrónicos de cuatro de sus periodistas para averiguar sus fuentes, en la continuación de esfuerzos similares con el Washington Post y la cadena CNN.
El Departamento de Justicia no explicó qué estaba investigando, pero la identidad de los cuatro reporteros da a entender que se refiere a una información clasificada en un artículo de abril de 2017 en relación a las investigaciones realizadas por el ahora exdirector del FBI, James Comey, durante la presunta injerencia rusa en la campaña presidencial de 2016.
Tanto las administraciones de Donald Trump como de Joe Biden impusieron una orden de silencio a los altos ejecutivos del medio, finalmente levantada el viernes. La orden de silencio impidió que los ejecutivos revelaran los esfuerzos del Gobierno para confiscar los registros incluso al editor ejecutivo, Dean Baquet.
- Desempleo en EEUU bajó del 6 % por primera vez desde el inicio de la pandemia
- EEUU destina USD 266 millones en ayuda humanitaria para Afganistán
La iniciativa salió a la luz tras un último esfuerzo, finalmente infructuoso, del Departamento de Justicia para confiscar los registros de correo electrónico de Google, que opera el sistema de correo electrónico del New York Times, y que se resistió al esfuerzo por obtener la información.
Repudian las acciones del Gobierno
La divulgación se produjo dos días después de que el Departamento de Justicia de Biden notificara a los cuatro periodistas que la administración Trump, en busca de sus fuentes, confiscó en secreto meses de sus registros telefónicos, como ya hiciera con el Post y la CNN.
Baquet repudió el comportamiento de las administraciones de Trump y Biden por sus acciones, y describió la operación como un asalto a la Primera Enmienda. “Google hizo lo correcto, pero no deberíamos haber llegado hasta este punto”, lamentó.
La administración Biden intentó retrasar la ejecución de la orden” en múltiples ocasiones en los últimos meses. Luego “actuó voluntariamente para retirarla antes de que constaran en actas judiciales”, según explicó el portavoz del Departamento de Justicia, Anthony Coley, al periódico.