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Gobernadores demócratas y republicanos piden un alivio fiscal

Pidieron 500 millones de dólares en apoyo fiscal para los gastos derivados de la pandemia

"El alivio fiscal estatal es urgente y debe ser una de las principales prioridades", pidieron Andrew Cuomo y Larry Hogan (Darren McGee/EFE)

15 minutos. Los estados de Nueva York y Maryland encabezaron este miércoles una reclamación de todos los estados al Congreso de Estados Unidos para lograr un esfuerzo bipartidista y poner en marcha un alivio fiscal que permita a las instituciones estatales abordar la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 con más fondos.

A través de un comunicado de la Asociación Nacional de Gobernadores (NGA por sus siglas en inglés), el demócrata neoyorquino Andrew Cuomo y el republicano de Maryland Larry Hogan pidieron a los congresistas que "dejen el partidismo a un lado" y se pongan de acuerdo por el bien del pueblo estadounidense.

En concreto, los gobernadores pidieron 500 millones de dólares en apoyo fiscal para los gastos derivados de la pandemia. También financiación para garantizar la asistencia sanitaria a las personas en condiciones más vulnerables. Además del 100 % del coste de la respuesta y los esfuerzos de recuperación que llevó a cabo la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias.

No es "fútbol político"

"Los gobernadores estatales cuentan con que nuestros líderes en Washington se pongan de acuerdo. Aprueben prioridades críticas que apoyen a los estados y territorios durante la pandemia, lo que permitirá que Estados Unidos se ponga en marcha de nuevo", expresaron los gobernadores.

"El alivio fiscal estatal es urgente y debe ser una de las principales prioridades", pidieron los dirigentes. Agregaron cada día que el Congreso no actúa, "los estados se ven obligados a hacer recortes que devastarán los servicios esenciales de los que depende el pueblo estadounidense y destruirán la recuperación económica incluso antes de que se produzca".

Para los gobernadores, en la Cámara de Representantes existe un amplio acuerdo sobre la necesidad de las ayudas. El país, a su juicio, no puede permitirse que los procesos partidistas conviertan esta cuestión en otro "fútbol político".

"Esto no es una crisis azul o roja. Es una crisis azul, blanca y roja porque el coronavirus es apolítico. No ataca a demócratas o republicanos sino a ciudadanos estadounidenses", concluyeron Cuomo y Hogan.

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