15 minutos. El relevo de la antorcha olímpica para los Juegos de Tokio 2020 arrancó este jueves en la prefectura de Fukushima, al noreste de Japón, con la llama portada por las integrantes de la selección nipona femenina de fútbol y entre medidas anti-COVID-19.
El relevó comenzó desde las instalaciones de entrenamiento J-Village, que anteriormente sirvieron de base logística para la crisis nuclear de Fukushima de 2011. La ceremonia contó con participantes limitados y sin público para prevenir contagios de coronavirus.
La primera en llevar la antorcha de Tokio
La futbolista nipona, Azusa Iwashimizu, fue la encargada de prender la antorcha de Tokio a partir de la llama olímpica que permanecía preservada en un candil en Japón desde hace un año. Comenzó el relevo recorriendo los campos de césped del J-Village acompañada de otras integrantes de las Nadeshiko, la selección que fue campeona mundial en 2011.
“Me ha honrado ser la primera persona en llevar la antorcha hoy. Pasaron 10 años desde que nos juntamos. Hoy era una buena ocasión”, dijo Iwashimizu a los medios tras el inicio del relevo.
Luego de esta jornada inaugural en Fukushima, la antorcha será transportada durante 121 días a manos de 10.000 corredores. El recorrido atravesará las 47 prefecturas del país y concluirá con el encendido del pebetero en el Estadio Olímpico de Tokio el próximo 23 de julio.
“La llama ha continuado ardiendo de forma serena mientras el mundo se enfrentaba a unos tiempos difíciles durante el último año”. Así lo dijo la presidenta del comité organizador de los Juegos de Tokio, Seiko Hashimoto, durante un discurso en la ceremonia inaugural.
Iluminar el camino
Hashimoto confió en que esta antorcha “pueda llegar a la inauguración de los Juegos llena de esperanza para todos en Japón y en el mundo, y brille en la oscuridad e ilumine el camino”, dijo la exatleta olímpica y anterior ministra a cargo de los Juegos.
La ceremonia inaugural tuvo lugar en un escenario instalado en el J-Village y decorado con ikebana (arreglos florales nipones) procedentes de Fukushima y las prefecturas de Miyage e Iwate, al noreste del país.
El acto contó con una participación de representantes políticos y deportivos nipones muy reducida, unos 160 en total, en el contexto de la pandemia. La organización solicitó contención a los ciudadanos para que no se congreguen de forma multitudinaria en las calles al paso del relevo.
También pidió aplaudir en lugar de animar de viva voz. Asimismo, advirtió que el relevo podría llegar a cancelarse en ciertos tramos en caso de haber presencia masiva de público.
Los corredores participantes en el relevo, por su parte, deberán mantener una distancia de seguridad entre ellos y llevar mascarilla en caso de que esa medida preventiva no sea posible, además de desinfectarse las manos y vigilar su estado de salud.