15 minutos. El presidente tunecino electo democráticamente, Beji Caïd Essebsi, murió este jueves a los 92 años, mientras su país conmemora el 63 aniversario de la abolición de la monarquía.
Militaba desde su juventud en el movimiento nacionalista Neodestur, liderado por Habib Burguiba, quien se convertiría en el primer presidente de la República Tunecina.
Essebsi garantizó la transición democrática, luego de que lo eligieran en los primeros comicios presidenciales limpios desde la llegada al poder de Zinedin el Abedin Ben Ali (1987-2011).
Hace una semana se negó a ratificar las enmiendas a la ley electoral que fueron aprobadas por el Parlamento, tres meses antes de otras elecciones legislativas.
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El hijo de Essebsi defendió la postura de su padre, pues éste consideraba que tales modificaciones eran “excluyentes” y lesivas para la transición.
La jefatura del Estado interina ha sido transferida al presidente del Parlamento, Mohamad Enneceur, de 85 años, otro político de la viaja guardia que igualmente ha sido ingresado en los últimos meses por problemas de salud.
Esta normativa electoral conlleva el endurecimiento de los requisitos para los aspirantes presidenciales.
Antes del 13 de julio, Essebsi hubiera podido ratificar el texto, reenviarlo a la Asamblea para otra lectura o someterlo a referéndum. Se abstuvo de escoger.
La Instancia Provisional de Control
de la Constitucionalidad de Proyectos de Ley (IPCCPL) rechazó el recurso de
inconstitucionalidad presentado por 51 diputados contra dichas enmiendas
“en su fondo, pero no en su forma”, sin dar más detalles.
