15 minutos. El secretario general de la ONU, António Guterres, criticó este viernes la actuación de “algunos policías” israelíes durante el funeral de la periodista palestina Shireen Abu Akleh y exigió respeto a la libertad de expresión y de reunión.
A través de un portavoz, Guterres se declaró “profundamente afectado por los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad israelíes y palestinos reunidos en el Hospital de Saint Joseph y por el comportamiento de algunos policías presentes en el lugar”.
El jefe de Naciones Unidas, además, instó a “respetar los derechos humanos fundamentales, incluidos los derechos a la libertad de opinión y expresión y a la asamblea pacífica”, señaló el portavoz, Farhan Haq, en un breve comunicado.
Guterres dijo que se “sintió conmovido” por el tributo rendido durante los últimos días por miles de palestinos a Abu Akleh, veterana periodista de la cadena Al Yazira que murió el miércoles por el impacto de una bala en la cabeza mientras cubría una redada en el campo de refugiados de Yenín, en Cisjordania ocupada, muerte de que la su medio, la Autoridad Nacional Palestina y la Liga Árabe culpan a Israel.
Condena internacional
Hoy, su funeral en Jerusalén estuvo cargado de tensión, registrándose cargas de la policía israelí contra los asistentes, a los que golpeó con bastones, haciendo tambalear y casi caer el ataúd de la periodista.
Los hechos han suscitado un amplio rechazo internacional, tanto desde el mundo árabe, como desde Europa, donde la Unión Europea ha condenado “el uso desproporcionado de la fuerza y el comportamiento irrespetuoso de la Policía israelí”.
En los últimos días, la comunidad internacional, casi de forma unánime, ha condenado el asesinato de Abu Akleh y ha exigido que haya una investigación independiente.
Tiene que investigarse
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió este viernes investigar los golpes de la Policía israelí contra los asistentes al funeral de la periodista palestina Shireen Abu Akleh, asesinada el miércoles de un disparo en la cabeza mientras cubría una redada del Ejército de Israel.
“No tengo todos los detalles, pero sé que tiene que investigarse”, dijo el mandatario a la prensa en un acto en la Casa Blanca, al ser preguntado sobre la actuación policial en las exequias de la veterana periodista de Al Yazira.
Previamente, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, había calificado en su rueda de prensa diaria de “perturbadoras” las imágenes del funeral.
“Lamentamos la intrusión de lo que debería haber sido una procesión pacífica. Hemos pedido respeto para el cortejo fúnebre y la familia”, expresó Psaki.