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Sindicatos y la Liga de los Derechos Humanos presentaron un recurso contra la medida, que finalmente prosperó y antepuso el derecho de manifestación
Cualquier manifestación debe ser objeto de una declaración previa ante el ayuntamiento o la prefectura correspondiente y las autoridades policiales o el prefecto pueden prohibirla si consideran que es probable que altere el orden público (Joel Saget/ Europa Press)
13 de junio de 2020 2:54 PM | Con información de DPA
15 minutos. El Consejo de Estado, última instancia para la vía administrativa en Francia, anunció este sábado la suspensión de la prohibición general de manifestarse aprobada en el decreto para atajar los contagios por el coronavirus y que limitaba a diez el número máximo de asistentes a un acto en espacio público.
El pasado jueves sindicatos y la Liga de los Derechos Humanos presentaron un recurso contra la medida, que finalmente prosperó y antepuso el derecho de manifestación.
Estaba en vigor desde el 31 de mayo, cuando se prohibió por decreto cualquier reunión de más de diez personas en espacio público.
"El juez de procedimientos sumarios del Consejo de Estado considera que la prohibición de manifestaciones no está justificada por la situación actual de salud cuando se pueden respetar las 'medidas de barrera'", explicó el Consejo en un comunicado oficial.
En cualquier caso la sentencia señala que cualquier manifestación debe ser objeto de una declaración previa ante el ayuntamiento o la prefectura correspondiente y que las autoridades policiales o el prefecto pueden prohibirla si consideran que es probable que altere el orden público, incluso por razones de salud, o cuando las circunstancias locales lo requieran.
El acontecimiento se reveló en el último Informe Internacional de Libertad Religiosa del Departamento de Estado de Estados Unidos, que expone múltiples casos de norcoreanos asesinados debido a su fe cristiana
En concreto, la OMS ha podido verificar 1.004 ataques, una categoría en la que se incluye cualquier acción física o verbal que implique una injerencia en el correcto desarrollo de la atención sanitaria
