Rodrigo Duterte recibió del Congreso filipino "poderes especiales" para hacerle frente a la pandemia
El país asiático tiene por los momentos 636 casos positivos y 38 muertes por COVID-19 (STR/EFE)
26 de marzo de 2020 1:26 PM | Con información de EFE
15 minutos. Confinamiento en jaulas para perros o permanencia a pleno sol durante horas son algunos de los castigos que las autoridades de Filipinas impusieron a los que violan la cuarentena durante la pandemia de COVID-19, denunció este jueves Human Rights Watch (HRW).
"La policía y los funcionarios locales deben respetar los derechos de las personas arrestadas por violar el toque de queda y otras regulaciones de salud pública", advirtió en un comunicado el subdirector de HRW para Asia, Phil Robertson.
Robertson señaló que cualquier tipo de maltrato debe investigarse de inmediato y que las autoridades responsables deben rendir cuentas y deben sancionarlas o procesarlas.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, impuso la cuarentena estricta en la isla de Luzón, donde se encuentra Manila, el 16 de marzo. Desde entonces la policía arrestó a cientos de personas.
Las autoridades de la ciudad de Santa Cruz, al sur de Manila, admitieron encerrar a cinco jóvenes en una jaula el 20 de marzo. A los jóvenes, que estaban acorralados por perros callejeros, los encerraron por "haber violado el toque de queda y agredirles verbalmente".
En Parañaque las autoridades obligaron a los infractores del toque de queda a sentarse bajo el intenso sol del mediodía tras el arresto. Sin embargo, luego justificaron que no tenían otro lugar donde retenerlos.
En la provincia de Bulacan, un agente mató a un hombre que supuestamente se saltó un puesto de control. No obstante, la policía esgrime que el hombre disparó primero al escapar.
HRW también advirtió que la detención indiscriminada abarrotará aún más los centros de detención del país (los más densamente poblados del mundo), propiciando la rápida expansión del coronavirus.
Filipinas se encuentra desde el miércoles en estado de emergencia, implicando que pueden detener a quienes violen la cuarentena "incluso si no resisten la acción policial". No obstante, esto puede llevar a abusos de derechos humanos, según alertaron varias organizaciones.
Duterte obtuvo del Congreso esta semana "poderes especiales" por tres meses para lidiar con la pandemia. Por ello anunció un plan de acción nacional dirigido por el Ejército y la Policía, un viraje represor según algunos críticos que apuntan a que debe ser el Departamento de Salud quien siga al frente de la respuesta a la epidemia.
Filipinas confirmó 636 casos positivos y 38 muertes por COVID-19. Sin embargo, solo el 0,0018 % de la población fue sometida a la prueba de diagnóstico, por lo que se sospecha que haya muchos más casos.
El portavoz del Gobierno, Olivier Véran, rechazó de forma tajante la propuesta sindical de buscar una mediación que ayude a superar la crisis social y política que vive Francia desde hace semanas a cambio de aparcar la aplicación de la reforma