La menor fue reportada como desaparecida el martes y hasta el momento no hay pistas del victimario
La fiesta comenzó una hora antes de que comenzara el toque de queda (Flickr)
25 de julio de 2019 5:32 PM | Por EFE
15 minutos. La violación y el asesinato de una niña indígena de 11 años ocurrido en el departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador, causó conmoción por la crueldad con la que actuó el agresor.
La menor Karen Andrea Bernal García fue reportada como desaparecida este martes luego de salir de su vivienda de la vereda Andalucía, dijo Gabriel Nasta, autoridad de ese resguardo del pueblo awá.
Luego de una intensa búsqueda el cuerpo de la niña fue hallado el miércoles en un cafetal con signos de haber sido violada y agredida con arma blanca.
El presidente colombiano, Iván Duque, dijo en redes sociales que "duele profundamente el asesinato de la niña Karen Andrea Bernal García, de 11 años, de la comunidad awá".
En el mismo mensaje el jefe de Estado hizo un llamamiento al país y señaló que los colombianos tiene que unirse "en la protección" de sus menores.
El pasado 20 de julio en la instalación de la nueva legislatura, Duque anunció que el Congreso impulsará la propuesta de cadena perpetua para violadores y asesinos de niños.
Sobre el crimen, Nasta explicó que "hasta el momento" no hay "indicios de quién puede ser (el asesino), porque ella iba por un camino central por el que anda mucha gente".
El líder indígena detalló que Karen vivía con su mamá, que tenía otra hermana y que el papá dejó la familia hace tiempo.
El resguardo Awa-El Sande tiene 8.825 hectáreas y está habitado por 3.600 indígenas.
El secretario Gobierno de Nariño, Mario Viteri, repudió el asesinato y aseguró que la Policía, la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo investigan el caso.
"Es un hecho lamentable por tratarse no solo de una mujer, sino de una menor de edad", aseguró.
La directora del estatal Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), Juliana Pungiluppi, anunció este jueves que brindará apoyo psicosocial a la madre y hermana.
"Confiamos en la celeridad de las investigaciones por parte de las autoridades competentes para que se castigue de manera ejemplar a los responsables de este crimen que enluta a todo el país, particularmente a las comunidades indígenas de Nariño", dijo Pungiluppi.
Añadió que "como sociedad no podemos aceptar que la lista de niñas violentadas y asesinadas siga creciendo".
Hace dos semanas Colombia se estremeció por la violación y asesinato de la niña Sharik Buitrago, ocurrido en el municipio de El Retorno, en el departamento del Guaviare (sur).
El Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses informó que en el primer trimestre de este año 8.230 menores de edad fueron víctimas de algún tipo de violencia sexual en Colombia.
La alarmante cifra representa un incremento del 15 % si se compara con la del mismo periodo de 2018, cuando se instauraron 7.165 denuncias.