Estos ataques se suman a la muerte violenta de un subintendente de 36 años ocurrida el viernes en Ocaña, en el departamento de Norte de Santander
10 de julio de 2022 2:56 PM | Con información de EFE
15 minutos. Un policía colombiano muerto y otro herido mientras asistía a las exequias de su madre dejaron sendos ataques del Clan del Golfo, la mayor banda criminal del país, contra miembros de la fuerza pública en el departamento del Chocó (oeste), informó este domingo la institución.
El policía asesinado fue identificado como Diómedes Chaverra Jaimes, de 39 años, quien "se encontraba de civil" cuando pistoleros lo atacaron en el municipio de Acandí. Así lo explicó el comandante de la Región 6 de la Policía, general Gustavo Franco.
"Lo sucedido en Acandí, Chocó, no quedará en la impunidad. Desplegamos todas nuestras capacidades para dar con el paradero de los responsables de este infame crimen que le arrebató la vida a nuestro subintendente Diómedes de Jesús Chaverra Sánchez". De esa forma lo escribió en Twitter el comandante de esa institución, general Jorge Luis Vargas.
En el otro ataque, perpetrado en la localidad de Lloró, el herido fue el patrullero Carlos Alfonso Lemus. Lo tirotearon cuando estaba en el funeral de su madre; lo trasladaron a un hospital de Quibdó, capital del Chocó.
"Un policía que se encontraba de permiso para asistir a las exequias de su señora madre en el municipio de Lloró (Chocó) fue atacado por criminales del Clan del Golfo, causándole lesiones por arma de fuego", agregó el general Franco.
Estos ataques se suman al asesinato del subintendente José Leonardo Jaimes Fernández, de 36 años. Los hechos ocurrieron el viernes en Ocaña, en el departamento de Norte de Santander. "Cumplía con su deber", según el ministro del Interior Daniel Palacios.
Unas tres horas antes de la publicación de la Fiscalía, el periodista Eligio Rojas, adscrito a medios afines al régimen, dijo a través de su cuenta de X que el coronel era “sometido a interrogatorio en la Dgcim"
El panorama de "elecciones libres" es cuestionado por muchos países, entre ellos EEUU, que veían un proceso electoral equilibrado como una salida a la prologada crsisis económica y política de Venezuela