15 minutos. Un buen samaritano evitó que el robo de un auto en la mañana del pasado sábado en una gasolinera Exxon de Ormond Beach.
La víctima, un hombre de 74 años, se estacionó en la gasolinera para ir al baño y cuando intentó salir de su auto, una mujer de 36 años, identificada como Marvette Perry, lo empujó fuera del auto y se sentó en el asiento del conductor.
Un hombre, llamado Adam McDaniels, que estaba de visita en Ormond Beach, vio lo que estaba ocurriendo y decidió actuar para ayudar a la víctima.
“Salí con mi arma de fuego”, dijo al medio Wesh 2. “Corrí, le apunté con mi arma de fuego con un láser al pecho y le dije que no buscara ningún arma”.
No podía ser indiferente
McDaniels dijo que guardó la pistola cuando se dio cuenta de que Perry no estaba armada. Sin embargo, por seguridad, se mantuvo cerca.
“Tan pronto como vio mi láser en su pecho, se detuvo, se quedó helada, no se movió ni habló. Intenté sacarla del auto, pero no hizo nada hasta que llegó la policía“, dijo.
Luego la víctima le sujetó el pie de Perry para que no se llevara el auto. Su esposa todavía estaba sentada en el lado del pasajero.
“Creo que ella estaba un poco alterada, pero él parecía bastante tranquilo. La sujetó por el tobillo y le dijo que no la soltaría”, dijo McDaniels.
“Vengo de un pequeño pueblo de Carolina del Norte donde la gente se ayuda unas a otras”, dijo McDaniels. “Simplemente no podía sentarme allí y ver cómo transcurría eso de una manera indiferente”.
Perry está detenido en la cárcel del condado de Volusia sin derecho a fianza.
