15 minutos. El alarmante repunte de la COVID-19 en Florida continuó esta semana imparable con 110.477 nuevos casos, una tasa de positividad del 18,1 % y cadenas de hospitales elevando el nivel de emergencia de “rojo” a “negro” debido al más del millar de hospitalizados en sus centros.
Las cifras divulgadas este viernes por el Departamento de Salud de Florida no pueden resultar más sombrías para la semana del 23 al 29 de julio, con un total de 110.477 nuevos contagiados de COVID-19, frente a los 73.196 registrados la semana previa, y 108 muertes.
La cifra de esta semana arroja una media de más de 15.700 nuevos casos diarios.
Si nos remontamos a la semana del 25 de junio, con 15.998 casos, hay una idea de la magnitud de la incidencia del coronavirus.
Además, la tasa de positividad subió del 15,3 % la semana pasada al 18,1 % la semana que termina este viernes.
Hasta este viernes, desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020, en Florida se contabiliza un total de 2.590.699 casos de COVID-19.
Al tiempo que se disparan los casos, el estado ha visto cómo sube de manera constante entre los indecisos la vacunación (334.064 nuevos vacunados esta semana) ante el temor a un posible contagio y en momentos en que los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU alertan de que la variante delta parece ser tan infecciosa como la varicela.
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Según los últimos datos oficiales, actualmente el 61 % de los floridanos mayores de 12 años o más está vacunado.
La comisionada de Agricultura de Florida, la demócrata Nikki Fried, expresó este viernes en el Capitolio de Florida su preocupación por la “dirección en la que vamos”, con más de 1.500 nuevos casos en 24 horas, según los datos entregados por el Departamento de Salud del estado a los CDC, dijo.
Pelea por información de COVID-19
En ausencia de actualizaciones diarias sobre la COVID-19 en Florida, suspendidas por el gobernador de este estado, el republicano Ron DeSantis, Fried comenzó esta semana a celebrar sesiones informativas sobre la incidencia de la pandemia.
En oposición al gobernador, Fried alentó a los floridanos a llevar mascarilla y seguir las recomendaciones de los CDC. Esto algo que choca con la orden ejecutiva firmada por DeSantis para que sean los padres quienes decidan si sus hijos usan tapabocas.
Tal como había anunciado previamente en una rueda de prensa, DeSantis firmó el decreto con entrada en vigor de manera inmediata dirigido a parar cualquier “rebelión” en los distritos escolares contra las leyes del estado. Y es que estas no contemplan ni han contemplado nunca durante la pandemia el uso obligatorio de mascarillas.
El republicano volvió a arremeter contra los CDC, que esta semana recularon y recomendaran a quienes estén vacunados que vuelvan a llevarla en espacios interiores.
La orden del gobernador supone en la práctica la imposibilidad de que los distritos escolares impongan el uso de mascarillas en los centros educativos locales.
Las autoridades dicen que las hospitalizaciones actuales están aumentando a un “ritmo rápido” y han superado su pico de enero de 2020 de 900.
Este viernes, los CDC señalaron que la altamente transmisible variante delta del coronavirus se puede difundir entre las personas completamente vacunadas y las no vacunadas.
Hospitales en emergencia
La cadena AdventHealth señala que el 94 % de las personas hospitalizadas por la COVID-19 no están vacunadas. También indicaron que la elevación a “negro” del nivel de emergencia significa que los hospitales en los condados de Polk, Orange, Lake, Osceola, Seminole, Volusia y Flagler (centro de Florida) comenzarán a aplazar los procedimientos que no sean de urgencia.
Por su parte, el Memorial Healthcare System indicó en un comunicado que atendió este viernes a 420 pacientes con la COVID-19. De estos tuvieron que ingresar a 55 en la unidad de cuidados intensivos.
Según la universidad Johns Hopkins, Florida es el tercer estado con más casos de COVID-19 y el cuarto con más muertes en todo el país.
