15 minutos. El médico de San Diego Mark Chávez, de 54 años, se declaró culpable el miércoles de suministrarle drogas a Matthew Perry. Chávez es la tercera persona en aceptar cargos en el caso de la sobredosis que acabó con la vida del actor de Friends.
El médico se declaró culpable de un delito grave de conspiración para distribuir el anestésico quirúrgico ketamina que mató a Perry. Lo hizo en un tribunal federal de Los Ángeles, después de llegar a un acuerdo con los fiscales en julio.
Chávez aceptó cooperar mientras la fiscalía federal presenta cargos más graves contra el médico Salvador Plasencia. Según los fiscales, Plasencia le dio ketamina directamente a Perry.
El otro objetivo principal de la investigación es Jasmine Sangha, una presunta traficante conocida como la “reina de la ketamina” de Los Ángeles y quien le dio la droga al actor.
Chávez respondió las preguntas de la jueza Sherilyn Peace Garnett y aceptó renunciar a varios derechos, incluyendo un juicio.
En total, admitió haber suministrado 22 viales de 5 mililitros de ketamina y 9 pastillas de ketamina.
Chávez permanece libre bajo fianza hasta que se le dicte sentencia el 2 de abril. Entregó su pasaporte y licencia médica, entre otras condiciones.
Perry fue encontrado muerto por su asistente el 28 de octubre de 2023. El médico forense dictaminó que la ketamina fue la causa principal de la muerte. El actor había estado usando la droga a través de su médico habitual como tratamiento legal, pero no aprobado, para la depresión.
La ketamina es un fármaco sintético derivado de la fenciclidina, antagonista del receptor NMDA, que es considerado como droga disociativa con potencial alucinógeno. Está aprobado para su uso como anestésico en humanos y animales.