15 minutos. Elon Musk es el protagonista de la edición de febrero de la revista Time.
El hombre más rico del mundo aparece sentado detrás del escritorio presidencial (resolute desk), como representación del gran poder que tiene en el gobierno de Donald Trump.
Si bien dirige el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), sus responsabilidades en la Administración van mucho más allá y están relacionadas con la gran influencia que tiene sobre Trump.
El poder y el alcance de DOGE sobre las distintas agencias del gobierno no parece tener límites, lo que ya le ha traído roces con esas dependencias.
Tal ha sido el poder de Musk mostrado hasta ahora en el gobierno, que la Casa Blanca tuvo que aclarar la semana pasada que él es un “empleado gubernamental especial”, cargo que no aparece en los papeles.
Un reportero le preguntó este viernes a Trump, si tenía alguna reacción sobre la portada y el presidente respondió “no, ¿todavía la revista Time sigue activa? No sabía eso… Elon Musk está haciendo un gran trabajo”.
La respuesta de Trump llega poco más de un mes después de que sonara campaña de apertura de Wall Street delante de grandes afiches que lo mostraban en la portada de la publicación como el Hombre del Año de 2024.
“Presidente Musk”, escribió la republicana extremista Laura Loomer en X junto a la imagen de la portada.
Por supuesto, no faltaron algunos memes como uno en el que se ve a Musk haciendo un saludo nazi, parecido al gesto que hizo durante la inauguración de Trump.
