15 minutos. El autor del peor tiroteo masivo en la historia de Suecia era una persona tranquila y solitaria que jamás había cometido un delito.
Rickard Andersson, de 35 años de edad, asesinó a 10 personas en la escuela para adultos de Risbergska, ubicada en la tranquila ciudad de Orebro. Se suicidó antes de que llegara la policía.
Los antecedentes de esta matanza parecen remontarse a la infancia de Andersson, período en el que enfrentó problemas psiquiátricos.
Esta puede haber sido una de las razones por las que no finalizara el bachillerato y no fuese llamado al servicio militar obligatorio de Suecia.
Personas cercanas a él, lo describieron como una persona tranquila y socialmente aislado que vivía en un estudio de Odebro. Prácticamente no dejó rastros digitales. No se han hallado cuentas suyas en ninguna de red social.
También dijeron que estuvo desempleado gran parte de su vida y que tenía licencia para portar varias armas. En el tiroteo usó un rifle de caza.
Este perfil coincide con lo dicho hasta ahora por la policía, que informó que, hasta ahora, todos los indicios parecen indicar que el autor actuó solo.
Coincidencias con otros tiroteos masivos
El 2017 puede ser clave también para entender lo ocurrido este martes. Ese año Andersson cambió su nombre; antes de llamaba Jonas Simon. La razón de este cambio aún se desconoce.
Una de las coincidencias que presenta este tiroteo con otros registrados en escuelas de Estados Unidos, es que el autor estudió en la institución donde ocurrió el hecho.
Andersson se registró en Risbergska para intentar terminar la secundaria, pero abandonó los estudios en 2021.
Hasta el momento, los investigadores desconocen si el tiroteo tuvo una motivación personal o se trató de una venganza ideológica.
En Risbergska suelen estudiar inmigrantes que buscan aprender sueco y personas con discapacidad.
Suecia tiene un largo historial de grupos neonazis y de extrema derecha que rechazan, entre otras cosas, la inmigración. Los crímenes más conocidos de estos grupos han sido el asesinato en 1986 del primer ministro sueco, Olof Palme y el homicidio de la ministra Anna Lindh en 2003.