"No quiera Dios que convirtamos esta ciudad santa en un baño de sangre", dijo el rabino del Muro de las Lamentaciones
El aforo de este año aumentó según las autoridades han relajado las medidas de restricción por el coronavirus (EFE/EPA/Erdem Sahin)
24 de marzo de 2023 9:03 AM | Con información de DPA
15 minutos. Más de 100 mil musulmanes acudieron a la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, según el Departamento de Dotación Islámica de la ciudad, para participar en la primera oración del viernes del mes sagrado del ramadán en medio de un importante despliegue de la Policía israelí, dada la tensión reinante durante los últimos meses en Cisjordania.
El rezo fue observado sin incidentes a pesar de ciertas restricciones a la población en el puesto de control militar de Qalandia, entre Jerusalén y Ramala (Cisjordania), según la agencia oficial de noticias palestina WAFA.
El aforo de este año aumentó según las autoridades han relajado las medidas de restricción por el coronavirus. El año pasado limitaron el acceso a la explanada a 55 mil personas.
El comandante del Distrito de Jerusalén de la Policía de Israel Doron Turgeman aplaudió el pacífico desarrollo de la oración del ramadán. "Hasta ahora estamos manteniendo un ambiente festivo", destacó. La conmemoración, de acuerdo con el jefe de la Policía Nacional israelí Kobi Shabtai, es un "periodo delicado y complejo".
De hecho, la reciente cumbre de seguridad israelí-palestina de este fin de semana en la ciudad-balneario egipcia de Sharm el Sheij tuvo como principal objetivo el establecimiento de una serie de medidas a plazo inmediato para relajar la tensión durante el mes del ramadán.
Han transcurrido meses de derramamiento de sangre por las operaciones israelíes en Cisjordania y ataques palestinos contra colonos y fuerzas de seguridad. Los hechos han dejado, respectivamente, en torno a 85 y 14 fallecidos desde principios de año.
La oración también ha transcurrido entre llamadas a la unidad; por ejemplo, la formulada por Shmuel Rabinovitch, el rabino del Muro de las Lamentaciones y de los Lugares Sagrados de Jerusalén. Habló de tender "una mano de reconciliación y hermandad entre los creyentes, en la Ciudad Vieja de Jerusalén y en toda la Tierra de Israel".
"Me gustaría hacer un llamado desde aquí a los líderes religiosos de las comunidades de creyentes en Jerusalén: no quiera Dios que convirtamos esta ciudad santa en un baño de sangre", declaró el rabino. "Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para aumentar el amor, la fraternidad y la paz en estos días, por el honor de nuestras creencias y por el honor de Jerusalén".